Michael Dell, CEO de una de las mayores empresas informáticas, ha asegurado que “los PC y portátiles con pantalla táctil diseñados para Windows 8 tendrán un precio superior a los actuales”. Para Dell, la llegada del nuevo sistema operativo no implica solo cambios en el software, sino la necesidad de adquirir hardware diseñado para aprovecharlo.
A esta alturas queda pocas dudas sobre lo importante que serán las interfaces táctiles para Windows 8 y Michael Dell se muestra convencido de que la transición supondrá un incentivo para las ventas de hardware, al menos en lo relativo al mercado de consumo. En lo relativo al sector profesional, el escenario que maneja la compañía es una trancisión mucho más suave dado que muchas empresas acaban de llegar a Windows 7 y tardarán en dar el siguiente paso.
¿Pensáis cambiar de ordenador cuando llegue Windows 8?¿Creéis que será necesario contar con un dispositivo táctil para aprovecharlo?